Las haciendas para bodas en Querétaro, son lugares mágicos, coloniales y una excelente elección al momento de pensar en el lugar para visitar y especialmente para celebrar tu fiesta de matrimonio. Esta grandiosa ciudad está ubicada a dos horas y media de la capital del país, convirtiendo a dicha ciudad en un destino concurrido, ya sea por motivos de negocios, vacaciones o para festejar algún evento especial.
El centro de esta ciudad cuenta con múltiples lugares considerados Patrimonio Mundial de la Humanidad, nombramiento otorgado por la UNESCO, al contar con bellas iglesias que sorprenden por su imponente arquitectura, particulares sitios históricos, coloridos hostales, hoteles boutique llenos de elegancia y detalles cálidos, amplios jardines y plazas.
Si lo que tienes en mente es celebrar tu evento en las haciendas para bodas en Querétaro, disfruta de una hermosa ciudad colonial. Ven a Querétaro, ya que es una ciudad muy bien situada, con edificios antiguos que le darán un toque elegante a tu evento. Querétaro es el destino perfecto para aquellos que disfrutan de caminar tranquilamente entre coloridas calles y festejar en grande.
Querétaro colonial
Las haciendas para bodas en Querétaro son una de las características que hacen tan especial a Querétaro , que a pesar del tiempo siguen conservando sus rasgos antiguos que hacen de estos espacios el lugar perfecto para convivir y disfrutar de momentos especiales con amigos y familia.
Ya sea una celebración casual, una ceremonia de graduación o que mejor, que por el festejo de una gran boda, elegir celebrar ese momento especial en una hacienda hará que todo sea único. La hacienda arquitectónicamente hablando está formada por varios edificios, que servían para realizar una serie de actividades. Espacios designados para la producción, habitación, administración e instrucción. Se trata de un espacio arquitectónico representativo del modo de vivir de una época.
El concepto arquitectónico de Hacienda se comienza usar por primera vez en Nueva España, a partir de la segunda mitad del siglo XVI. La palabra y concepto textual llego a México durante el proceso de colonización, pasado el tiempo el término comenzó a extenderse. Las haciendas mexicanas generalmente disponen de una Casa Señorial, conocida como “Casco”, dispuesta de una área principal en forma de cuadro, L o U, y alrededor se extiende un amplio jardín o patio.
En la mayoría de los casos este tipo de espacios arquitectónicos conocidas como haciendas eran las viviendas señoriales, siendo edificios relevantes dentro de las ciudades que actualmente conocemos como coloniales. Estos espacios son edificaciones de buen tamaño, con techos altos y con espectaculares jardines en donde destacan detalles de ornamentación, lo que tramite elegancia.
Haciendas para bodas en Querétaro
La diferencia principal entre hacienda y rancho es su extensión, la primera es mucho más amplia en cuanto a jardines y áreas comunes a comparación de a la segunda. La hacienda es una edificación con múltiples detalles que crean una atmosfera llena de calidez, este tipo de espacios antiguamente se caracterizaban por: a) autosuficiencia económica, b) dentro se desarrollaba una dinámica de comunidad “con el tiempo este tipo de asentamientos se convirtieron en el parte aguas para la propagación de los municipios c) la administración económica y de producción.
Hoy en día debido a su espectacular belleza y asombrosa arquitectura, muchas de estas haciendas para bodas en Querétaro han sido abiertas para el público y fungen como museos, hoteles, o como espacios para realizar eventos sociales. Debido a su gran extensión las haciendas son lugares perfectos para eventos sociales de cualquier tipo, ya sean bodas, cumpleaños, graduaciones eventos empresariales.
Seguro tendrás un ambiente lleno de elegancia, y con la capacidad de albergar a una gran cantidad de invitados, gracias a sus hermosos jardines que te permiten crear un ambiente propicio y de fácil adaptación para una velada increíble. Además de su belleza natural que perdura a través del tiempo en el recuerdo de tus invitados.
¿Jardín para fiestas o hacienda?
Un gran ejemplo de ello es Dos Arroyos, la combinación perfecta entre rasgos coloniales de una hacienda y la frescura de un elegante jardín. A diferencia de las antiguas haciendas que ahora han sido convertidas en elegantes hoteles boutique, Dos Arroyos cuenta con fáciles vías de acceso a unos cuantos minutos del centro de la ciudad y un amplio jardín que sorprende a cualquiera. Esta espectacular hacienda se ha convertido en una opción original en cuanto a festejar tus bodas; haciendo de tu celebración un evento cargado de elegancia y romanticismo.
Dos Arroyos se encuentran en Santa Rosa Jáuregui, delegación de la capital del estado de Querétaro. Esta comunidad en las afueras de la ciudad, remonta su origen al siglo XVII, en los terrenos de lo que en aquel entonces, era la Hacienda La Solana. Para el año 1820 la comunidad contaba con siete mil habitantes, el 5 de Mayo de 1822 el alcalde en turno reconoce la Independencia de México. Las constituciones locales del estado de Querétaro de 1825, 1869 y 1879, anexan y denominan a esta comunidad como municipio.
Santa Rosa Jáuregui en Querétaro
En 1871 el Ayuntamiento hace la solicitud a Ignacio Timoteo Fernández de Jáuregui, la venta de los terrenos de esta población, pero su decisión se basó en donarlos, con ciertas condicionantes, entre ellas, mantener la historia de las personas que en algún momento vivieron y disfrutaron del lugar.
En años posteriores Don Rogelio Garfias Ruiz, abogado, periodista y filántropo queretano, adquirió esta propiedad, la cual cuidaba y preservaba con mucho cariño y dedicación, con la intención de que no perdiera esa esencia e historias que venía conservando desde hacía muchos años. Su legado, ha sido custodiado con el mismo afán por sus descendientes, pasando así por generaciones y abriendo sus puertas al público, para que sirva como un recinto de armonía natural y celebración, del cual puedan disfrutar generaciones futuras.
Haciendas en Querétaro
Esta bella Hacienda es la combinación exacta entre lo mágico de lo antiguo con la comodidad y elegancia de lo moderno, entre la cercanía de la ciudad y la tranquilidad del campo, en Dos arroyos sabemos que la mejor manera de construir un gran futuro es recordando un gran pasado, es por ello que las haciendas son ideales para escribir cualquier historia llena de amor. ¿Te da curiosidad conocer alguna? Escríbenos y con mucho gusto te proporcionamos más información. ¡Estaremos felices de atenderte!
